Se genera una vulneración a los derechos fundamentales de las personas invalidas que se van agravando con el paso del tiempo, de forma paulatina y progresiva, cuando continúan laborando y siguen realizando los aportes a la seguridad social , pero al momento de solicitar la pensión las administradoras no tienen en cuenta las cotizaciones que se generaron con posterioridad a la estructuración , esta situación puede generar un enriquecimiento sin justa causa.